Alejandro le revela a Victoria que planea devolverle la hacienda Pérez-Soler como regalo de bodas, pero ella se niega a aceptarla. Deborah se aprovecha del odio de Gabino y lo invita a trabajar juntos para vengarse de Valente por haberlos separado. A pesar de las explicaciones de Nidia, Ángel le deja claro que no reconocerá a Romina como su hija hasta ver una prueba de paternidad. Deborah practica la firma de Alejandro para poner a nombre de Gabino la hacienda Pérez-Soler sin la autorización de su sobrino.